Tenía 75 años y padecía ELA. Había escrito novelas clave de la literatura argentina.
Nombre clave para comprender la literatura argentina contemporánea, Ricardo Piglia (Adrogué, 1941) falleció hoy a causa de las complicaciones derivadas de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) que sufría desde hace dos años.
Piglia escribió las novelas “Respiración artificial”, “La ciudad ausente”, “Plata quemada”, “Blanco nocturno” y “El camino de Ida”; los cuentos de “Nombre falso”, “La invasión” y “Prisión perpetua”; y los ensayos “Formas breves”, “Crítica y ficción”, “El último lector”, “Antología personal”, “La forma inicial” y “Las tres vanguardias”.
Profesor emérito en la Universidad de Princeton y ex profesor de la Universidad de Buenos Aires, al momento de fallecer Piglia trabajaba, con la ayuda de un grupo de personas, en su autobiografía “Los diarios de Emilio Renzi”, dividida en tres volúmenes: “Años de formación” y “Los años felices”, ya publicados. Y “Un día en la vida”, prevista para este año.
Había nacido en Adrogué el 24 de noviembre de 1941. Después de la caída de Perón, en 1955, se instaló en Mar del Plata.
Piglia estudió Historia en la Universidad Nacional de La Plata, ciudad donde vivió hasta 1965. Después trabajó durante una década en editoriales de Buenos Aires y dirigió la Serie Negra, famosa colección de policiales que difundió a Dashiell Hammett, Raymond Chandler, David Goodis y Horace McCoy.
Piglia era crítico, ensayista y profesor académico. Había estudiado a Brecht, Benjamin y Lukács, a Erich Auerbach, Szondi y Vernant, a los rusos Tiniánov, Sklovski o Bajtin. En esa línea, elaboró ensayos sobre Roberto Arlt, Jorge Jorge Luis Borges, Domingo Faustino Sarmiento, Macedonio Fernández y otros escritores argentinos.